M.V. Hugo Antonio Useche Romero
Médico Veterinario Practicante en Equinos
Especialista en Reproducción y Podología Equina
Una fractura es la ruptura parcial o total de un hueso y se pueden clasificar en:
Abiertas o expuestas: cuando hay exposición al exterior acompañado por herida.
Cerradas: cuando es un golpe seco y, no hay exposición de fragmentos al exterior. No hay penetración de la piel.
Completa: cuando existen por lo menos 2 fragmentos.
Incompleto: sólo una parte de la corteza.
Incompleto: sólo una parte de la corteza.
Transversa: ocurre en huesos largos.
Oblicua: diagonal al eje longitudinal del hueso también se ven más en huesos largos.
Espiral: sobretodo las que ocurren a nivel del húmero, sigue la forma del húmero, una forma espiral, también en el metacarpo del equino, por lo general ocurren como fuerzas rotacionales.
Conminuta: cuando hay al menos 3 fragmentos de hueso y tienen un punto común de unión.
Múltiples: son 3 o más fragmentos pero no tienen un punto común de unión.
El día 28 de Diciembre me encontraba laborando normalmente cuando recibo una llamada, del señor José Guerrero nativo de la población de la Varita del municipio Zea del estado Mérida, el cual me dice textualmente “buenos días, me dijeron que usted era curioso para lo de las partiduras de los animales, porque tengo un mulito que se le partió una mano”, me causó gracia las palabras, pero igual le dije que contara conmigo que inmediatamente luego de que me desocupara lo llamaba para vernos allá.
En horas de la tarde lo llamo y el me da las indicaciones para llegar a su casa, organicé las cosas y me fuí de inmediato. Al llegar al sitio me encuentro con una carretera de tierra, la cual seguí hasta que se acabo, luego había que caminar aproximadamente 1 hora en ascenso por la montaña para poder llegar a la casa donde estaba el mulito.
(Camino montañoso)
Al llegar a la pesebrera donde se encontraba el mulo, procedo a revisarlo y era muy evidente la fractura del animal, en su gran metacarpiano izquierdo (el gran metacarpo o también conocido como el hueso de la caña, conformado por el metacarpo III y por los metacarpos II y IV los cuales son rudimentarios), el dueño me dice que por favor le salve a su mulito que el lo aprecia mucho, que es su medio de trabajo y que ha ganado con él, muchos trofeos en las tradicionales carreras de mulas de los pueblos andinos.
(Vista Caudal) (Vista Frontal)
Al ver la gravedad de la fractura, procedí a tumbarlo con Xilacina y Ketamina, para poder inmovilizarlo con un yeso común, que era lo único que tenía a la mano, ya que el ideal para estos casos es el yeso de acrílico.
Le administre 20cc de Novalcina y 10 cc de Triancinolona para tratar de aliviarle el dolor, lo mas rápido posible
(Mulo enyesado)
Para el proceso del yeso use 5 guatas y 5 yesos normales, ya que era con lo único que contaba en el momento, pero gracias a dios fue suficiente para enderezarle su miembro y poder estabilizarlo por el momento, ya que con el pasar de los días y la humedad el mismo se reblandece, se debilita y por ende se daña.
Debido a que me encontraba en una montaña con pocos recursos, solo con los medicamentos que tenia a la mano y las ganas de salvar al mulito, le pregunte al dueño si tenían tubo PVC y tripa de bicicleta y me dijo que sí, porque esas son cosas de trabajos cotidianos en el campo, así que le colocamos un tubo PVC al yeso y se lo fijamos con la tripa de bicicleta con la finalidad de protegerlo de la humedad y darle mas resistencia al yeso.
Al pasar el efecto de la anestesia el animal se paró sin ninguna complicación, lo metimos a su pesebrera y a los 30 minutos estaba comiendo y bebiendo de manera normal, ya que anteriormente por el dolor casi no se alimentaba.
Luego de unos días el mulo PARRANDERO como es conocido en la zona, se estaba recuperando perfectamente, su yeso protegido sigue rígido y cumpliendo su función, comiendo normalmente y su evolución positiva es constante.
(Improvisación con el tubo PVC y la tripa de bicicleta)
Luego de 2 meses aproximadamente, me dirijo nuevamente al lugar donde se encontraba el mulito parrandero y el resultado de la inmovilización fue satisfactorio.
(Parrandero luego de 2 meses de tratamiento)
Su hueso se encontraba soldado perfectamente con su callo óseo respectivo, aunque existía una alteración en sus aplomos debido al tiempo que pasó inmovilizado en su pesebrera, como se puede ver en las imágenes.
(Desaplomos en sus manos)
Debido a la distancia y la ubicación del animal, no contaba con el equipo adecuado para trabajar el desaplomo en ese momento, así que usamos las pocas herramientas que tenía su propietario para tratar de aplomarlo.
(Colaboración del propietario en los aplomos del mulo)
Finalmente, luego de todos los procedimientos realizados en el mulo, se observó un gran éxito, lográndose alcanzar un estado de satisfacción en el animal, ya que su miembro anterior izquierdo, superó la fractura que presentaba en el gran metacarpo, dándole normal movilidad y estabilidad en el mismo, generándole una excelente calidad de vida a este ejemplar, ya que anteriormente estos animales eran sacrificados.
(Parrandero en su pesebrera asentando su mano izquierda sin dificultad)
M.V. Hugo Antonio Useche Romero
Médico Veterinario Practicante en Equinos
Especialista en Reproducción y Podología Equina
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