La historia de la yegua de Coleo La Roraima de Trujillo.
Dr. Carlos Federico Rodríguez Garantón
El día 19 de Febrero del 2012 tarde en la noche me llama el señor Luis Grassano con voz de angustiado en la otra línea del celular. Eran como las 10 y 30, me dice que a su yegua La Roraima coleándole un toro en Trujillo, estado Trujillo el coleador que le colea a su yegua le coleo un toro abrochado y este le cayo en la para a su querida yegua y el cree que se la quebró porque no afincaba la pata y la cargaba en el aire después de esa coleada. Angustiado como pudieron sacaron a la yegua de la manga de coleo y no hubo quien no pensara en meterle un tiro en la puerta del coso como es la costumbre hasta hace poco en todas las mangas de coleo del país. Una acción macabra ejecutada por un ser humano quien minutos antes habría disfrutado del placer de estar en los lomos de cada caballo fracturado en tardes de coleaderas.
Luis sin conocerme había leído mis escritos en la pagina web www.toroscoleados.com y pensó por un momento que tal vez yo pudiera ayudar a su yegua y como pudo la montó en el tráiler y desde la caballeriza me llamó. Le dije que no se preocupara que la íbamos a curar, pero que yo estaba muy lejos en La Guaira Estado Vargas. Que le pusiera la mano en la cabeza y que pusiera atención a lo que iba hacer. Y comencé a orar, pidiéndole a Dios Jehová el único Dios a quien yo reconozco que me diera la sabiduría para curar la pata fracturada de este animal enfermo que estaba tan lejos de mí. Le pedí con fuerzas y mucha fe a su único hijo Jesucristo que me diera el poder de sanación para sanarlo, así como le dio el poder de sanación a los apóstoles, que me diera el poder de sanación a mí también para curar a esta yegua. Amen!. Le imploré a la Virgen del Carmen bendito que la cubriera con su manto milagroso.
Le dije que me hiciera un buen vendaje acolchonado y forrado con una venda porosa auto adhesiva llamada tensoplast y que ya mañana era otro día y que le haría un dibujo de una férula que el debía aplicar con un herrero de la zona.
Es bueno aclarar que yo nunca había visto al señor Luis Grassano en mi vida y que hasta la fecha no se quien es ni a quien se parece. Ni una foto he visto, pero eso poco me importa, a mi lo que me mueve es la yegua que tampoco la conocía, ni la he podido conocer hasta la fecha, solo fotos y videos a montón, pero a ella nunca la he tocado, ni se a que huele. Pero eso tampoco me importa. El solo hecho de saber que no fue asesinada para mi ya es una misión cumplida.
Apenas colgué la llamada me puse a dibujar según las características que el mismo me dio, del lugar exacto de la fractura. A las 12 de la noche, ya tenia hecho el diseño y el dibujo hecho para Roraima. En la mañana temprano ya el tenía al herrero y por casualidades de la vida un doctor de Barquisimeto estaba por la zona con una maquina de rayos x tomando placas y el se las hizo tomar y me las mandó de inmediato por el celular.
Se podía apreciar una dislocación de hueso sesamoideo proximal con ruptura de sus ligamentos y el tendón flexor superficial elevó al sesamoidea dislocado al tercio inferior de la caña. También se puede claramente observar una fractura articular en la cara anterior de la epífisis proximal de primera falange. Esta situación iba a causar una anquilosis de la articulación metatarso falangiano. Es decir que en un futuro muy cercano el organismo comenzaría a mandar sales de calcio a la articulación y la misma dejaría de moverse. Pero eso no sería un problema para la yegua llevar una vida normal.
Siguiendo mis instrucciones al pie de la letra retiraron la herradura y armaron la férula con 2 platinas una anterior y otra posterior soldadas en una herradura de huevo. A media mañana ya estaba armada la férula. Bajo sedación se le colocó esta armazón pegada al casco. Previamente se realizó un vendaje de Robert Johnes y luego con un tensoplast se unieron las platinas de hierro a la pata.
Luis y yo conversamos unas 5 veces al día sobre la salud de la yegua, que día a día fue mejorando y pasó 1 mes y me mandó videos de la yegua en franca recuperación caminando y a los 2 meses y medio ya la yegua trotaba. Ya no era un cadáver. Era de nuevo un animal útil que serviría de madre.
Le dije a Luis, debes de inmediato preñarla por inseminación para que el peso del caballo en el momento de la cópula vaya a causar un nuevo daño a ese miembro que se esta terminando de soldar.
Al mes de esa conversación ya sin la férula y la fractura consolidada la yegua fue servida. Me dice Luis que a los 2 meses la hizo palpar por un veterinario de la zona quien le dijo que la yegua estaba preñada.
Ya hoy es 2013 luego de casi un año del accidente la yegua esta bella y hermosa y nunca llego a parir. Estaba vacía. Así que le dije que cuando se aburriera de perder el tiempo que me la trajera para conocerlo a los dos y que se la lleve preñada de una vez.
Esta es la historia de la yegua de coleo La Roraima del propietario Luis Grassano quien a punta de amor y siguiendo mis consejos logró salvar de la muerte a su querida yegua.
Que dios los bendiga. Que en momentos de crisis siempre hay una salida y que esta no tiene por que ser la muerte.
Cada caballo, yegua, potro o potra deben ser salvados de la muerte, y que se deben agotar todos los recursos posibles antes de pensar en darles un tiro.
Darles un tiro no es una solución en ningún caso. Amen!
Atentamente
Dr. Carlos Federico Rodríguez Garantón
Médico Veterinario especialista en equinos.
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