Infección de la ranilla #TecnicaRodriguera
#TratamientoRodriguero Dr. Carlos Federico Rodríguez Garantón, Dr. Freddy
Francisco Fernández Escobar, Dr. Samuel Ysai Rodríguez Guevara y Aux. Vet.
Orianna Rodríguez.
Caso clínico: infección de la ranilla
Resumen: en el
presente informe se expone el caso clínico de un equino macho, mestizo de
aproximadamente 15 años de edad con presencia de una infección a nivel de la
ranilla en el miembro anterior derecho.
Introducción:
La Ranilla es una estructura en forma
triangular delimitada por surcos laminares, ubicada en la zona plantar o palmar
del casco hacia la zona de los talones. Junto con las demás estructuras que
componen el casco, proporciona la resistencia necesaria ante la compresión
durante la pisada, de igual manera brinda protección a las estructuras internas
del casco.
Figura 1. Conformación de la ranilla
Además, ejerce un papel
importante en la circulación sanguínea de la zona. El que la sangre llegue al
casco es una tarea fácil para el organismo, solamente la gravedad hace que la
sangre penetre en él. La dificultad viene al drenar la sangre de la zona. Una
circulación anormal de la sangre puede provocar patologías como la
laminitis. La ranilla (su conformación y disposición) ayuda a la buena
circulación ya que el caballo cada vez que pisa el suelo, comprime esta
estructura y actúa como una bomba para facilitar a la salida de la sangre del
casco.
La infección de la ranilla
es una de las causas más comunes de consulta veterinaria en equinos, ya que mayormente
es consecuencia de un mal manejo y cuidado del animal.
La infección de la ranilla
es degenerativa y aparece tanto en las lagunas laterales como en la laguna
central. Las bacterias que provocan esta patología atacan directamente a la queratina, proteína que forma parte del
estuche córneo del casco, provocando así una pérdida de consistencia y rigidez.
El signo más significativo en él diagnóstico
de la afección, a parte del reblandecimiento de
la ranilla, es la presencia de una secreción negra y fétida presente en
la zona. A pesar de la presencia de dichos signos, el caballo no tiene por qué presentar ningún
signo de incomodidad o cojera. Es por ello que una revisión diaria y una
frecuente limpieza de los cascos nos puede ayudar a atacar el problema a tiempo
y a prevenir infecciones crónicas.
Figura 2. Signo de presencia de infección de la
ranilla
Cuando la infección no es
tratada a tiempo puede llegar a afectar al tejido adyacente de la suela del
casco y extenderse hacia estructuras más profundas pudiendo llegar al cuerpo de
la ranilla, pared del casco y al bulbo del talón. En este caso ya encontramos
dolor a la palpación de la ranilla y talones, inflamación de las extremidades y
cojera. No debemos confundir la infección de ranilla con el Canker, que es
una infección de mayor gravedad en la cual la ranilla se reblandece de manera
más notable, se presenta mal oliente y se extiende rápidamente hacia la suela
del casco. En este caso el único tratamiento es la cirugía.
Aunque existen causas
genéticas que pueden hacer más propensos a algunos animales ante dicha
patología, el fallo en el manejo diario del animal suele ser la causa más
común. Al tener un caballo existen ciertas condiciones que debemos tener en
cuenta para evitar este tipo de lesiones:
Estado del puesto: Una cama sucia y húmeda
creará el ambiente perfecto para el crecimiento de las bacterias que afectarán
la ranilla del caballo. Es importante tener en cuenta que en los cascos es
común el acúmulo de heces y amoniaco
producto de la orina.
Conformación del casco: Un casco alargado y
con talones estrechos tendrá una ranilla pequeña y el surco central estrecho.
Esto favorece a la aparición de una fisura entre los talones. Tanto la laguna
central como la fisura después del trabajo se pueden llenar de arena. Si no se
limpia cuidadosamente, provocará irritación y favorecerá la entrada de
bacterias, con las consiguientes complicaciones.
Recorte de cascos o herraje: Un herraje o recorte incorrecto puede favorecer la aparición de infección.
Por ejemplo, una herradura que quede muy estrecha en la zona de talones no
permitirá la expansión del casco y provocará que la ranilla quede comprimida,
lo además de dolor, favorecerá la colonización de ésta por parte de las
bacterias.
Limpieza de cascos: Si no se limpian los
cascos con regularidad, existirá un acumulo de restos de cama y humedad en la
palma, lo que también puede predisponer a la aparición de la infección.
El tratamiento adecuado
consiste en la limpieza y extracción de todo el tejido dañado, hasta alcanzar
el tejido sano. Después se procederá a insertar algodón con ayuda de un clavo
en las ranuras de la ranilla, el algodón debe ser insertado profunda y
completamente de manera de que no se salga.
Figura 3. Limpieza del
casco y recorte del casco.
Después de que todo el algodón esté insertado en la zona afectada se
procede a mojarlo abundantemente con Gemsiantan, que es una pomada
cicatrizante, desinfectante, fungicida y antiséptica. El medicamento debe ser
aplicado tanto en la zona de la ranilla como en las murallas, donde se
encuentran los clavos de la herradura.
Figura 4. Inserción del
algodón.
Figura
5. Aplicación del Gemsiantan.
Se recomienda cambiar las mechas de algodón
semanalmente y apreciar la evolución de la infección y la regeneración del
casco con frecuencia, ya que es una infección que suele reincidir.
Evaluación
del paciente:
Anamnesis
Paciente mestizo de 15 años de edad, el cual al
momento del herraje se vio la presencia de tejido dañado y mal oliente en la
zona de la ranilla del miembro anterior derecho.
Figura 6.
Inspección del paciente.
Metodología
El día sábado 25 de enero del año en curso, los estudiantes de la cohorte
1 de medicina veterinaria de la Universidad Jesús María Semprum tuvimos la
oportunidad de asistir a una práctica de herraje equino dirigida por el Dr.
Carlos Federico Rodríguez, practicante equino con más de 30 años de
experiencia. Al llegar tuvimos la oportunidad de observar e incluso intervenir
en el proceso de herraje de varios caballos que se encuentran en esa
caballeriza ubicada en Guarenas Edo Miranda. Después de realizar la inspección
de los cascos pudimos observar que uno de los caballos presentaba un tejido
negruzco y mal oliente a nivel de la ranilla, por lo que se procedió a una
inspección más minuciosa con el fin de determinar si nos encontrábamos ante una
infección de la misma.
El hombre en la actualidad ha transformado los hábitos comunes de la
fauna, tanto a nivel alimenticio como sus hábitats. Por ende, es común
encontrar a los caballos en lugares llamados box, establos o puestos; en los
cuales se agrega concha de arroz o viruta de madera con el fin de que actúen
como cama, el caballo orina y defeca sobre este material en descomposición y se
para constantemente sobre él. El amoniaco presente en la orina destruye la
unión de los puentes de disulfuro que conforman la estructura del casco. Esta
destrucción permite la entrada de hongos y bacterias del medio a la estructura
córnea de la pezuña; el acumulo de estas sustancias contaminantes y la entrada
de hongos y bacterias mantienen a las estructuras débiles y susceptibles a
contraer infecciones.
El caballo está dotado de una fuerte suela con el fin de resistir el
impacto contra piedras o terrenos duros, y poseen una estructura conocida
comúnmente como ranilla, llave o candado; la cual tiene forma de cuña Y es de
material córneo con un mayor contenido de agua lo que le confiere flexibilidad
para abrir los cuartos posteriores del casco Y recibir la presión de las
estructuras óseas; de igual forma es una estructura de tracción. En la
composición de la ranilla podemos apreciar que tiene una laguna o salcus en el
medio y dos laterales, en las cuales se acumula el excremento y la orina y se
comienzan a podrir.
En caballos no estabulados no se presentan este tipo de problemas, ya que
al estar en constante movimiento las estructuras del casco se mantienen siempre
limpias, de igual forma los rayos ultravioletas del ambiente ayudan al control
de bacterias y hongos. Esto nos demuestra que aunque el propietario sea muy
dedicado y mantenga el puesto de su caballo limpio, siempre cabe la posibilidad
de que se presenten estas afecciones.
Al momento de la inspección se
recomienda verificar el contenido acumulado en los cascos, ya que el olor y la
coloración en caso de infecciones suelen ser característicos. El material se
observa de color negro, con una consistencia blanda y un olor fétido bastante
fuerte. La presencia de cojera en el miembro afectado nos demuestra que la
infección ha avanzado y no solo se ubica en la ranilla.
Figura 7. Casco afectado
En este caso, el caballo no presentaba
claudicación, lo que es un buen signo. Por lo que se procede directamente a la
limpieza del casco afectado. Se debe retirar todo el tejido dañado hasta llegar
a tejido sano, después de que haya sido completamente retirado con la ayuda de
un clavo de herraje podemos comparar la consistencia de la ranilla, la cual
debe encontrarse mucho más débil de lo normal, como consecuencia de la
infección.
Después de la limpieza se continúa con el
proceso de herraje de forma normal, ya que el herraje en caliente ayuda también
a eliminar bacterias y hongos que puedan estar presentes en las murallas del
casco. Y, posteriormente se realiza la cura.
Figura 8. Herraje en caliente.
Al momento de realizar la
cura se recomienda insertar algodón con
ayuda de un clavo de herraje en todas las ranuras de la ranilla del miembro
afectado; el mismo debe insertarse profundamente con el fin de que no se salga.
Después de confirmar que el algodón esté perfectamente dispuesto se procede a
aplicar el Gemsiantan en toda la zona, el cual es un potente antiséptico,
cicatrizante, fungicida y desinfectante.
Figura 9. Inserción del algodón.
Figura 10. Aplicación del Gemsiantan.
Se recomienda realizar el mismo procedimiento
semanalmente; de igual forma, es importante la revisión constante de la zona
para apreciar la evolución de la infección y la regeneración del casco.
Caso clínico: Onicomicosis
Resumen: en el presente informe se expone caso
clínico de yegua con una micosis aguda e infección del casco en miembro
posterior derecho.
Introducción:
La enfermedad de la línea Blanca, también
conocida como “onicomicosis", “podredumbre del casco", “casco
vacío" o “infección por levaduras" , es una enfermedad causada por
hongos y bacterias anaeróbicas, los
cuales colonizan y afectan toda la pared del casco del caballo. Las enzimas
liberadas descomponen la queratina y la materia cornea en subproductos que son
aprovechados por las bacterias y hongos. El resultado de esta invasión suele
determinar la ruina del casco y por ende, la ruina del caballo.
En estos casos es común observar un casco
completamente deteriorado, quebradizo e incluso incompleto. Ya que, el hongo va
destruyendo la composición del mismo. Al tratar el caso es importante tener en
cuenta que los hongos no responden a antibióticos y antifúngicos locales.
El casco del caballo está compuesto por tres estratos:
Estrato externo o tectorio: Compuesto por tejido córneo
tubular, tiene pocos milímetros de grosor y recubre la superficie externa de la
piel. Hacia la banda coronaria suele ser flexible, mientras que distalmente se
vuelve una estructura deshidratada. Es el más fuerte de los estratos.
Estrato medio o línea de agua: Estrato de mayor amplitud,
conforma el cuerpo de la pared, su región proximal es cóncava para la formación
de la laguna coronaria. Se encuentra altamente hidratado y es donde usualmente
se produce la onicomicosis.
Estrato interno: Estrato no pigmentado,
compuesto de aproximadamente 600 laminillas queratinizadas epidermales. Zona
donde se introducen los clavos a la hora del herraje.
La onicomicosis: es una condición en la cual
ocurre una progresiva separación del casco a nivel del estrato córneo no
pigmentado, producto de la presentación inicial de una línea Blanca irregular
que progresa hasta la formación de una fisura de tipo sanitaria que divide el
estrato medio de las laminillas sensitivas internas.
Se reportan un gran número de causas y
factores predisponentes, tales como agentes micóticos, mala conformación de
cascos e incluso problemas alimenticios, ya que, estudios de microscopía han
revelado cambios estructurales en el casco por efecto de diversos tipos de suplementación
dietética. Los microminerales como el cobre y el zinc juegan un rol importante
en el buen estado de los cascos. De igual manera la limpieza regular de los
cascos, como de los puestos es de vital importancia para la prevención de esta
y otro tipo de infecciones comunes.
El tratamiento adecuado consiste
principalmente en la limpieza del casco, la remoción de todo el tejido dañado y
posteriormente un aplomo correcto que permita la regeneración y crecimiento del
casco afectado.
Después de la remoción de todo el tejido
dañado se inserta algodón en las ranuras de la ranilla con ayuda de un clavo de
herraje, lo más profundo que se pueda para después aplicar gemsiantan, el cual
es un potente antiséptico, antibacteriano y cicatrizante. Al terminar de
aplicar el gemsiantan se recomienda aplicar “casco duro" con un cepillo de
dientes, no importa que esté usado, sobre toda la superficie del casco; ya que
es una solución endurecedora de cascos y pezuñas con propiedades
antibacterianas y antimicóticas.
Evaluación del paciente:
Metodología
El día sábado 25 de enero del año en curso,
durante una práctica de herraje equino dirigida por el Dr. Carlos Federico
Rodríguez, los estudiantes de la Cohorte 1 de medicina veterinaria de la
Universidad del Sur del Lago tuvimos la oportunidad de inspeccionar distintos
caballos pertenecientes a una caballeriza ubicada en Guarenas Edo. Miranda.
Entre los caballos vistos observamos una yegua castaña, muy querida por su
propietario la cual presenta constantes problemas en los cascos. En ese momento
fue para realizar un herraje común, y para que el Dr la inspeccionara ya que
presenta una micosis a nivel de la línea blanca del casco, y tras varios
tratamientos con sulfato de cobre e inmersión de la pata afectada en gasoil no
se evidencia evolución.
Figura 11. Inspección de la Yegua a tratar.
Su propietario también
afirma que es muy cuidadoso y meticuloso en el cuidado de sus yeguas así como
de la limpieza de sus cascos y puestos, por lo que se extraña de que la
infección aún no se cure y la micosis siga afectándola. Esto nos demuestra, que
un puesto limpio y la atención que consideramos adecuada no siempre son
garantía de que nuestros caballos no se verán afectados por este tipo de
patologías.
El primer paso fue la
remoción de las herraduras viejas y la limpieza de los cascos, en el miembro afectado
se retiró todo el tejido dañado y se aplomo de forma que la herradura pudiera
ser puesta correctamente. Después del aplomo se procedió a quemar la planta del
casco con un soplete con el fin de quemar todas las bacterias y microorganismos
contaminantes que pudieran estar presentes en la zona, a pesar del impacto que
pueda causar esta técnica, no causa ningún tipo de dolor o daño en las
estructuras del casco.
Figura 12. Aplomo y herraje realizado por el Dr. Samuel
Rodríguez
Figura 14. Técnica de quemado con soplete.
En estos casos es necesario colocar los clavos
de la herradura dispuestos hacia la zona medial del casco, ya que el mismo se
encuentra débil y es común que se salgan las herraduras al poco tiempo.
Al finalizar el herraje se procedió a
introducir algodón en las ranuras de la ranilla, con ayuda de un clavo de
herraje; el cual fue impregnado con Gemsiantan,
ya que el mismo tiene propiedades
antisépticas y antibacterianas, con el fin de tratar la infección presente.
Posteriormente, con un cepillo de dientes usado, se aplicó “casco duro"
sobre toda la superficie del casco; el cual endurecerá el mismo y evitará la
propagación de más bacterias y hongos.
Figura 15. Cura realizada
por estudiante de Medicina veterinaria de la UNESUR.
Se recomendó al propietario estar al pendiente
de la evolución de la infección y a realizar el procedimiento de la cura
semanalmente, procurando así una regeneración total y óptima del casco.
Te recomendamos ver este enlace explicativo sobre la Infeccion de la Ranilla.
Conclusiones:
A la hora de tener un
caballo debemos tener en cuenta que su bienestar depende exclusivamente de
nosotros, y que al modificar su hábitat natural, los volvemos susceptibles a
múltiples patologías y lesiones. Los casos clínicos expuestos anteriormente son
algunas de las causas más comunes de consultas veterinarias, e igualmente las
causas más comunes de problemas graves en equinos. Una infección tratada a
tiempo puede prevenir cirugías, tratamientos intensivos y lesiones graves como
infosuras. Por lo cual es un artículo dirigido a los propietarios, con el fin
de crear conciencia y promover el cuidado y manejo correcto de estos animales
tan nobles y majestuosos; ya que la vida de los caballos radica en la salud de
sus patas.
Para culminar quiero
agradecer al equipo de caballo salud por la oportunidad brindada, por los
conocimientos compartidos y especialmente al Dr. Carlos Federico Rodríguez por
la orientación y la disposición al formar nuevos veterinarios con afinidad y
amor por el mundo equino.
Referencias Bibliograficas
1.
Rodríguez, C. (4 de mayo de 2013). Tratamiento de la
infección de la cápsula córnea del equino, técnica Rodriguera. Recuperado de: http://caballosalud.blogspot.com/2013/05/tratamiento-de-la-infeccion-de-la.html?m=1
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Vásquez, R.
(21 de agosto de 2012 ). Onicomicosis
(hormiguillo). Recuperado de: https://jineteycaballo.blogspot.com/2012/08/onicomicosis-hormiguillo.html?m=1
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S.A (8 de noviembre de 2017). Infecciones de
Ranilla. Recuperado de: http://www.equinvest.es/2017/11/08/infecciones-de-ranilla/
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S.A (2017). Destrucción del casco del caballo por
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Rodríguez, C. Caballosalud. (7 de Julio de 2014).
Infección de la ranilla, como tratarla. Recuperado de: https://youtu.be/kJzzdKuGa0s
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Caballosalud Costa Rica. (23 de Marzo de 2019).
Infección de ranilla. Recuperado de: https://youtu.be/u7Qm7cRF05w
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Rodríguez, C.
Caballosalud. (08 de agosto de 2017). Onicomicosis, caballo de equitación
@caballosalud Dr Carlos Federico Rodríguez Garantón. Recuperado de: https://youtu.be/GxZRniZkxTM
Autores:
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Dr.Carlos Federico Rodriguez Garantón.
GRADUADO EN LA UCV-FCV 1987 MI VIDA DEDICADA A LOS CABALLOS CRIADO EN EL CAFETAL CCS VENEZUELA. HE TRABAJADO CON CABALLOS DE PASO FINO EN TODOS LOS PAÍSES DONDE EXISTEN Y HE JUZGADO, MONTADO, HERRADO, CURADO CABALLOS TODA MI VIDA. PADRE DE CARLA GABRIELA Y ALEXANDRA RODRIGUEZ. HIJO DE ALÍ RODRÍGUEZ Y ELSA GARANTÓN NICOLAI. COLIE DESDE LOS 12 AÑOS HASTA LOS 25 Y CLASIFIQUE A 6 CAMPEONATOS NACIONALES POR EL ESTADO MIRANDA. TRABAJE 13 AÑOS COMO DIRECTOR DE LOS SERVICIOS VETERINARIOS DE LOS HIPÓDROMOS DE VENEZUELA. AHORA DEDICADO A ENSEÑAR TODO LO QUE SE A TODO EL QUE QUIERA APRENDER DE MI. DIOS ES MI GUÍA!. AMEN!